Colección inolvidable de discos: 14 Joyas Musicales Cubanas

Bienvenidos a un relato de creatividad sin fronteras, donde cada nota musical y cada color vibrante cuenta una historia única.

En esta serie especial, les invito a explorar cómo la fusión de inspiración cultural y técnica artística dio vida a una colección inolvidable de portadas de discos.

Una experiencia que no solo desafió mi habilidad como ilustrador independiente, sino que también me permitió sumergirme profundamente en la rica herencia musical de Cuba.

La serie no solo celebra la música, sino que también cuenta una historia visual que trasciende el tiempo y el espacio, invitando a los oyentes oir sus canciones y explorar el mundo más allá de sus horizontes conocidos.

Acompáñenme mientras desvelamos cómo se tejieron estas narrativas visuales, inspiradas en la isla de Cuba, para dar vida a melodías con sus sonidos originales de la época y que ahora bailan más allá de sus orígenes insulares, alcanzando corazones en continentes distantes.

Se me dio la oportunidad de trabajar como ilustrador en este proyecto mano a mano con la discográfica Guantanamera Records.

Fué una aventura realizar cada portada y contraportada de estos discos de acetato, creando una historia inspirada en la música tropical, usando la alegría que esta cultura expresa en los colores brillantes,alegres y saturados hasta evocar el espíritu vibrante de la bandera cubana.

Cada portada de estos discos de acetato es el resultado de un viaje creativo.

Esta Joya Musical Cubana fue la realización de poder tener varios artistas y sus canciones de una época en el mismo lugar y la idea de poder expresar esa melodía musical muy latina y sus raíces.

Me inspiré en el propio país de Cuba, es una isla y estar rodeado por el agua del inmenso Océano Atlántico me llevó a imaginar cómo sería contar una historia donde los pentagramas de la música salieran a explorar y conocer el mundo y llevar su melodía.

Estos diseños ilustrados en los años 1985, especialmente en acuarela y anilina, los textos se hacían por separado, estaba comenzando la era de la impresión por computadora y solo había unos pocos tipos de letras, un par de jóvenes que ofrecían ese servicio en un garaje me ayudaron a desarrollar los textos.

Que luego cortaba y pegaba bien alineados y montados en un acetato transparente indicando dónde debían imprimirse, marcaba las esquinas para que en la imprenta pudieran colocar todo donde debía enmarcarse.

La imprenta se encargaba de hacer la separación de colores y allí realizaban el trabajo de impresión, que yo tenía que supervisar.

La historia contada es la siguiente:

La serie de disco en vinyl llamada "14 Joyas Musicales Cubanas" estan encerradas en un libro, los pentagramas y notas musicales de la música de cada canción acordaron salir y ver el mundo desde el exterior y llevar su sabor y cultura al mundo, hacer felices a muchos con sus melodías.

Logrando salir del libro, emergen en las aguas saladas y comienzan a nadar, saltar y descubrir que hay mucho que ver.

Mientras se refrescan con un sabroso cóctel de coco y conversando entre ellos, deciden hacer un picnic y comienzan a cantar sus melodías que el viento y las corrientes oceánicas comenzaron a llevar a otros continentes.

Al final, cada portada diseñada no solo encapsula una canción, sino que también narra una parte de la vasta historia musical cubana, demostrando cómo el arte puede ser un puente entre culturas y un catalizador para llevar la magia de la música a cada rincón del mundo.